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Las vidrieras están muy de moda. En la decoración de paredes, permiten ampliar espacios gracias al efecto trampantojo. Mediante este truco, se ilumina la habitación, con una apertura ficticia hacia el exterior. Son una invitación a viajar, son muy exóticas. ¡Nos sorprendemos a nosotros mismos soñando! Tenemos así acceso a un bonito jardín de invierno o de repente nos encontramos en los invernaderos reales de Laeken, en Bélgica. ¿O es la vista real de nuestro estudio de artista?